2020 fue un año de transformaciones. Desde nuestra manera de trabajar hasta nuestra forma de vivir. Los cambios fueron profundos y, poco a poco, se vislumbra aquello que llegó para quedarse. En este contexto, el mercado inmobiliario fue también escenario de transformaciones y nuevas tendencias. Seguí leyendo y conocé lo que la pandemia nos dejó.
El sueño de la casa con jardín
La pandemia reflotó y revalorizó el concepto de casa y la posibilidad de contar con un espacio verde en el hogar. Si algunos años atrás las torres de edificios con amenities habían ganado protagonismo, en 2020 más de una persona volvió a soñar con una casa con jardín como su vivienda perfecta.
Construcción sustentable
Materiales sustentables y energías renovables ganan espacio al momento de pensar en construir. No solo para desarrolladores sino también para consumidores que quieren viviendas en sintonía con el cuidado del medio ambiente. “Las personas quieren saber de qué se trata esto de las energías renovables y cómo lo pueden llevar a sus casas. Tanto para ahorrar cómo para ser sustentables” argumentó Martín Mom, CEO en Sudamérica de REHAU, en la quinta edición del encuentro nacional Real Estate. El futuro es sustentable y el universo inmobiliario lo sabe.
Mudarse también en pandemia
Aunque a simple vista la pandemia se sintió como un freno, lo cierto es que muchas personas encontraron en este parate mundial la oportunidad para cambiar de hogar. Mientras algunas decidieron achicarse, otras tantas optaron por un espacio más grande. De esta forma, lejos de quedar en stand by, las mudanzas se pusieron en marcha.
Alejarse de los centros urbanos
Para muchos oficinistas el home office demostró que se puede trabajar desde cualquier lugar. El único límite y condición es la conexión wi-fi y la señal de teléfono. Entonces… ¿por qué no vivir más cerca de la naturaleza? se convirtió en una incógnita recurrente.
Oficinas sí, home office también
De un día para el otro la oficina se mudó al hogar. Sin embargo, la pandemia está lejos de haber significado el final de las oficinas. Lo que sí se vislumbra en el futuro es un sistema mixto. La posibilidad de trabajar algunos días desde el hogar y otros desde la oficina.